Aunque los ingleses afirman que el Golden retriever surge del cruzamiento entre el Flat coated retriever y el Tweed water spaniel (raza hoy completamente desaparecida), la teoría más verosímil y hoy comúnmente aceptada es la que establece a este perro como descendiente directo de un perro ruso habitualmente utilizado como batidor y cobrador de animales. Este perro, conocido ya a comienzos del siglo pasado, era utilizado en las grandes partidas de caza de los zares, así como también para custodia de las ovejas en el Cáucaso. Dotado de gran inteligencia y excelente memoria, era con frecuencia amaestrado y presentado como atracción en circos ecuestres. Fue justamente en un circo ruso, de gira por Inglaterra, que, en 1858 en Brigton, lord Tweedmouth vio a estos perros en su trabajo y se entusiasmó tanto con ellos que los quiso comprar. Cruzándolos entre sí e introduciendo después sangre del Bloodhound de capa clara y de otros retriever ingleses obtuvo el Golden retriever, cuyo reconocimiento oficial se llevó a cabo en 1913. Las grandes cualidades naturales de este perro hicieron que, rápidamente, fuera apreciado por un gran número de entusiastas, hasta el punto de que se difundió rápidamente en todas las naciones de lengua inglesa. Por su carácter firme y decidido fue después utilizado también como perro lazarillo y de guardería, confirmando así su origen de perros que en el pasado ya eran utilizados par otros fines además de la caza.